La Escuela Digital


          J U E G O S       E D U C A T I V O S

El Dominó.




El dominó es un juego de mesa, fácil de jugar y entretenido, que es muy apropiado para enseñarlo a los niños que acaban de aprender los números y a sumarlos; por cuanto además de que les fija sus conocimientos, los lleva a seguir un plan de juego sencillo, para tratar de mantener una acumulación mínima de valor, y les permite valorar la importancia de aprender.

Además es un juego que pueden aprender con sus padres, y prontamente jugar entre ellos.



   

El dominó se juega utilizando un conjunto de 28 fichas, cada una de las cuales tiene dos números – representados por puntos, excepto el cero que está en blanco – de cero a seis, como muestra la ilustración de la izquierda.

Para iniciar el juego, esas fichas se mezclan en forma desordenada sobre la mesa, – como muestra la ilustración de la derecha –de modo que no se vean los números; y cada jugador elige al azar 7 fichas.

   

Pueden jugar hasta cuatro jugadores en una misma partida; si son menos, quedarán 7 o 14 fichas sobre la mesa, que podrán utilizarse más adelante.






Para iniciar el juego, cada jugador coloca sus 7 fichas iniciales de forma que sólo él pueda ver los números que tiene, y no queden a la vista del otro u otros jugadores. (Ilustración abajo, a la izquierda).

Comienza el juego el jugador que tenga una ficha con un extremo de número mayor; generalmente un 6 o un 5, eventualmente un 4, difícilmente uno menor, que coloca en forma visible sobre el centro de la mesa. El siguiente jugador, debe colocar una de sus fichas de forma que coincida con uno de los números de la ficha que esté en la mesa. En la ilustración, el juego se inició con la ficha 6-4, y continuó con la ficha 6-3. Luego, el otro jugador colocó la ficha 3-5 y finalmente su oponente colocó la ficha 4-2. Está a la vista, que el jugador tiene para colocar las fichas 2-0, 5-4, 5-2 y 6-2; pero en la ilustración de la derecha, se ve que colocó la ficha 5-4.

 
 
 

El objetivo primario del juego, es deshacerse de las fichas que sumen un valor más alto; pero una táctica del juego, en cierto momento en que un jugador tenga fichas que sumen poco, puede ser cerrar el juego, haciendo que solamente quede un número para cubrir, como sucedería si en la ilustración de la izquierda, el jugador hubiera colocado su ficha 5-2, dejando solamente 5 o 2 para cubrir. En esa posibilidad, para decidir si le convendría más que quedara el 5 o que quedara el 2, tendría que analizar qué números ya fueron jugados, para deducir qué posibilidades tiene su oponente de poder cubrir el extremo resultante.

Cuando un jugador no tiene posibilidad de cubrir con el mismo número uno de los extremos, si han quedado fichas no retiradas, debe retirar una hasta encontrar la que pueda colocar en el juego. El juego termina cuando uno de los jugadores logra colocar en la mesa la totalidad de sus fichas; o de otro modo, cuando ya no quedan fichas para tomar y no es posible continuar el juego.

En la ilustración de arriba, a la derecha, el juego ha terminado, porque se agotaron las fichas y ninguno pudo continuar. La línea de fichas jugadas, muestra que ambos extremos quedaron cerrados con el 3; (observar que los "dobles" se colocan transversalmente), y no había más fichas con 3 para continuarlo.

En esa situación, ambos jugadores debieron exhibir las fichas que les quedaron sin colocar en el juego, y sumar los puntos. El primero tenía 6 fichas que suman 36 puntos; el otro tenía 9 fichas que suman 43 puntos, por lo cual este último ha perdido el juego, por haberse quedado al final con un número mayor de puntos.

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