La Escuela Digital




          I D I O M A     E S P A Ñ O L

P u n t u a c i ó n



Pongan un Atajo (acceso directo) a esta pantalla en su tableta y utilicen este selector para ir a cada tema


En las tabletas conviene ampliar el tamaño de las letras
para pulsar los temas, golpeando dos veces la pantalla.

La puntuación y sus signos
El punto |La coma | El punto y coma
| Los dos puntos
Los puntos suspensivos | Interrogación y admitación
Paréntesis y llaves | Corchetes | El guión y la raya
Las comillas | Diéresis | La barra inclinada
Apóstrofe | Signo de párrafo | División silábica


La puntuación.

En los textos escritos la puntuación consiste en la intercalación de diversos signos distintos de las letras, cuya función es la de marcar los matices de su desarrollo, sea en cuanto a determinar los que responden a la comprensión de los contenidos enunciados mediante la realización de distintos tipos de pausas; o indicando la entonación durante su expresión oral que permita percibir claramente al oyente el sentido con que se habla.

Los caracteres que se emplean en el lenguaje escrito para definir la puntuación se denominan signos de puntuación.

Los signos de puntuación que se emplean en la escritura en idioma español son:

  • El punto — que se representa con el carácter .

  • La coma — que se representa con el carácter ,

  • El punto y coma — que se representa con el carácter ;

  • Los dos puntos — que se representan con el carácter :

  • Los puntos suspensivos — que se representan con el carácter ...

  • La interrogación — que se representa con los caracteres ¿ y ?

  • La admiración — que se representa con los caracteres ¡ y !

  • Los paréntesis — que se representan con los caracteres ( y )

  • Los corchetes — que se representan con los caracteres [ y ]

  • El guión y la raya — que se representan con los caracteres y -

  • Las comillas — que se representan con los caracteres " o y

  • La barra inclinada — que se representa con el carácter /

  • El apóstrofe — que se representa con el carácter '

Como se advierte, hay signos de puntuación simples, que constan de un único carácter; y dobles. que constan de uno inicial o de apertura y otro final o de cierre.

Los signos simples, punto, coma, punto y coma, dos puntos y puntos suspensivos, se escriben siempre a continuación, sin dejar un espacio de separació con la palabra anterior, y separados por un espacio de la palabra que sigue, cuando la hay en la misma oración. Salvo en el caso de los guiones dobles, que pueden escribirse dejando espacio entre las palabras anterior y siguiente; y de la barra inclinada que normalmente se escribe sin espacios con las palabras entre las que se inserta.

Los signos dobles que tienen un carácter de apertura y otro de cierre, interrogación, admiración, paréntesis, corchetes, y comillas; se escriben sin espacio con la palabra siguiente, inicial del período afectado, y sin espacio detrás de la última palabra del mismo período.

Ir al principio


El punto

El punto es el signo que indica el final de una oración.

Luego del punto, si el texto continúa, la siguiente oración comienza siempre con mayúscula.

Dependiendo del grado en que la siguiente oración mantenga una continuidad con el contenido de la finalizada, e integra un mismo párrafo, se tratará de un punto y seguido. O, si en cierta medida tiene un contenido diverso, y comienza un párrafo nuevo, de un punto y aparte y se escribirá en una nueva línea.

El punto final no se distingue, en principio, del punto y aparte; salvo que en algunos estilos de escriturar documentos, se comienza el siguiente párrafo dejando algunos espacios al principio - que se llaman sangría o indentación - o dejando doble linea en blanco; o ambas cosas.

El punto también se utiliza también después de una abreviatura - como Sr. o Ing. - pero en tal caso, el uso de mayúscula a continuación depende de cada situación, debiéndose continuar en minúscula salvo que claramente no proceda.

Cuando al final de la oración existe otro signo de puntuación - por ejemplo un cierre de interrogación o admiración, o un cierre de comillas - el punto se coloca siempre a continuación; salvo que, si se trata de paréntesis, el período afectado constituya una oración autónoma.

Las oraciones que constituyen títulos, nombre de capítulos o secciones de un documento, o subtítulos, cuando van centradas o indentadas, o no, y el texto continúa en una nueva línea, no se cierran con punto.


El punto, como signo, tiene otros usos en la escrituración habitual:

  • En los números se utiliza el punto, generalmente para separar el orden de los millares; aunque también se utiliza la coma para separar las unidades de los decimales, y los dos puntos para separar el orden de los millones: 3:548.637,89. En algunas actividades, especialmente automatizadas, se sustituyen esos signos de puntuación por espacios en blanco: 3 548 637,89. Tampoco se pone punto para separar el orden de los miles en los años: 2014.

  • Si bien lo común en diversos sistemas automatizados de cálculo es indicar la operación aritmética de multiplicación en vez del signo de × el signo del asterisco * como ocurre en las calculadoras electrónicas; puede ocurrir que se utilice en sustitución de este último un punto centrado:.

Ir al principio


La coma

La coma es un signo de puntuación que indica una pausa breve dentro de la oración. Al mismo tiempo que separa diversos miembros que dentro de la oración cumplen distintas funciones, en la lectura oral da la oportunidad de respirar adecuadamente.

Las situaciones principales en que se emplea la coma, comprenden:

  • Cuando una oración resulta extensa, en condiciones que hacen necesaria una pausa. Ello habilita a elaborar, sobre todo en la escritura, oraciones de cierta extensión en cuanto es requerido por la unidad temática del razonamiento o la exposición; aunque debe evitarse redactar párrafos excesivamente extensos.

  • En las oraciones de carácter enumerativo, cuando se mencionan sucesivamente diversos términos coparticipando en la acción de un mismo verbo; o cuando se enuncian diversos sustantivos a los que se aplicará una misma adjetivación o que integran un colectivo: Vinieron todos, el padre, los hijos, los sobrinos, los tíos. El caballo, la vaca y la oveja son animales del campo.

    En estos casos, la coma sustituye la partícula copulativa y; por lo cual no se coloca detrás del último término enumerado, cuando la oración continúa. Tampoco se coloca la coma cuando entre los términos de la enumeración median las conjunciones y, e, ni, o, u: No le importaba la hora, el lugar ni las personas presentes.

    Se usa la coma delante de la conjunción copulativa entre varios períodos, cuando existe un cambio en el sentido o se vincula con la acción anterior: Fuimos a tu casa, salimos de compras, y volvimos muy cansados.

  • En las oraciones de carácter invocativo, cuando se menciona a quien es dirigida la oración: Presta atención, Pedro, que no se rompa ese valioso jarrón.

  • En las oraciones de carácter aclaratorio o complementario, cuando se inserta un período breve con esa finalidad: Me recibió Cacique, el perro, dando muestras de alegría. Si la aclaración es al final de la oración solamente se coloca la coma inicial y se cierra con el punto. Cuando esa aclaración tenga cierta extensión, se coloca entre guiones.

  • En las oraciones de carácter indicativo o atributivo, cuando se indica a quien se refiere el contexto: Mantengan silencio, dijo la maestra.

  • Antes de un período adversativo o condicional, que delimita la proposición que le antecede: Pueden salir, pero bien abrigados.

  • Para evitar la repetición del verbo, o cuando queda implícito: Ella perdió la paciencia, yo, la billetera.


La coma, como signo, tiene otros usos en la escrituración habitual, como separador de los enteros en los números con decimales: 3,1416.

Ir al principio


El punto y coma

El punto y coma es un signo de puntuación que, además de indicar una pausa breve dentro de la oración y ofrecer una oportunidad de respirar en la lectura oral; marca dentro de la oración un período, que cierra una proposición y abre otra que sigue vinculada a la anterior, y por lo tanto no llega a ser el cierre de la oración como ocurre con el punto.

Las situaciones principales en que se emplea el punto y coma, comprenden:

  • En las oraciones de carácter enumerativo, cuando se enumeran objetos de distinta clase, separados por comas, para separar las distintas clases: En su biblioteca tiene libros de literatura, ciencias y filosofía; en su cocina anafe, espiedo y microondas; en el jardín una glorieta, piscina, rosales y varios árboles.

  • Para separar diversas proposiciones que, dentro de una misma oración se refieren a diversas cuestiones relacionadas con su objeto: El automóvil ha recorrido muchos kilómetros; necesita revisión de neumáticos y líquido de frenos; para estar seguro en la carretera.

En algunos casos, puede ser más adecuado emplear el punto y seguido en vez del punto y coma . Eso depende tanto del interés de no elaborar oraciones demasiado extensas, como del grado de correlación entre las sucesivas proposiciones. En el ejemplo anterior, tanto podría escribirse por lo tanto hay que llevarlo al taller luego de punto y coma, como luego de punto y seguido.

Ir al principio


Los dos puntos

Los dos puntos en vertical, conforman un signo de puntuación que tiene la función de abrir una instancia de espectativa; que crea un estado de especial atención respecto de contenido que se anuncia. Como los anteriores, también ofrece una oportunidad de respirar en la lectura oral; pero durante ella debe determinar una inflexión especial, concordante con ese anuncio.

Las situaciones principales en que se emplean los dos puntos, comprenden:

  • Tal como en este mismo caso, cuando se anuncia una enumeración; en cuyo caso los dos puntos operan como punto final de párrafo, iniciándose la enumeración en una nueva línea.

    En los casos apropiados, la enunciación puede continuarse en el mismo párrafo: En esta situación caben dos opciones: a) hacerlo de inmediato; o b) esperar un tiempo.

  • Dentro de un mismo párrafo, para anunciar una proposición de especial importancia, especialmente para establecer un concepto que resulta central para el tema tratado: Es preciso ser muy claro: esta situación requiere atención inmediata.

  • Para anunciar la transcripción de un ejemplo, (como en este mismo documento), o de una cita de otro texto: Bien decía Sócrates: “Sólo sé, que nada sé”.

  • Inmediatamente después de invocar la persona, o el auditorio, al cual se dirigirá una carta, un mensaje personal, o una alocución: Querido amigo, estimados colegas, señoras y señores:
    Naturalmente, el texto comenzará en una nueva línea.

  • En cierto tipo de documentos de índole formal, para encabezar la declaración que es su objeto: Por los precedentes fundamentos, FALLO:
    Igualmente, el texto comenzará en una nueva línea.


Los dos puntos, como signo, tienen otros usos en la escrituración habitual:

  • Como separador de las horas, los minutos y en su caso los segundos, en las referencias de horario; y asimismo en las de la latitud y longitud geográfica: son las 14:28:45, y estamos en latitud 32:17:56 y longitud 22:17:56.

  • En la notación matemática, como una de las formas de representar la división (siendo otras la barra inclinada y el símbolo ÷; y asimismo las relaciones de proporcionalidad: 18 : 3 = 6 — 10:5::4:2.

Ir al principio


Los puntos suspensivos

Los puntos suspensivos conforman un signo de puntuación cuya función es marcar que la oración queda truncada; se presume que el lector conoce su continuación; el autor ha tenido un momento de reflexión antes de continuar; con el sentido de dejar abierta su culminación; y a menudo, estando completa, para dar al texto un sentido irónico, o dubitativo.

También pueden utilizarse, al final de una enunciación, como un indicativo de que la enunciación no es completa, como un equivalente a la expresión etcétera.

Ejemplos:

  • Frase truncada: Si no llegaran en hora...

  • Continuación conocida: Al que nace barrigón...

  • Reflexión: Estuve pensando en ir... pero decidí no hacerlo.

  • Enumeración incompleta: En el Zoo había monos, jirafas, elefantes...

  • Frase a continuar: "Aquí me pongo a cantar..."

  • Ironía: De eso, mejor ni hablar...

Otro uso es cuando en una transcripción se omite para del texto por innecesaro y para abreviarla, colocando los puntos suspensivos entre paréntesis: "Se puede sancionar (...) la falta de aseo."

Ir al principio


Interrogación y admiración

Los signos de interrogación y de admiración enmarcan una frase, o un período autónomo de la misma, con la función de darle expresión gráfica a su sentido interrogativo o admirativo; sea para la comprensión del lector, sea para que en la lectura oral se le imprima el tipo de énfasis correspondiente.

Ambos son signos dobles, que tienen una forma gráfica de apertura y otra de cierre; por lo que la primera se coloca al inicio del texto afectado, sin dejar espacio de separación; y la segunda se coloca al final, pegado a la última palabra. Si el signo se encuentra al final de la oración, no se pone punto.

En algunos idiomas la forma interrogativa se manifiesta en modificaciones en la estructura, especialmente del verbo; por lo que no se hace necesario colocar el carácter inicial indicador de interrogación. Ello no ocurre en el idioma español, por lo cual es indispensable colocar siempre el signo de apertura.

El signo inicial se coloca al principio del período que contiene la interrogación o implica la admiración, aunque no sea al principio de la oración. En este último caso, si la interrogación va dirigida a una persona, su invocación se coloca antes del inicio del signo si es hecha antes; pero si es hecha al final se coloca el signo detrás de su mención: Pedro, ¿vienes? — ¿Vienes Pedro?

Varias frases interrogativas o admirativas continuadas, requieren que se inicien y terminen cada una de ellas con los signos respectivos, y se escriben como si tuvieran punto y seguido; aunque también pueden ir separadas por comas o punto y comas. Cuando las condiciones de la expresión lo requieran, pueden intercalarse interrogativas con admirativas.

Una frase interrogativa o admirativa puede finalizar en puntos suspensivos; en cuyo caso el signo interrogativo o admirativo final se coloca detrás de ellos.

Los signos de interrogación y de admiración pueden ser empleados como comentarios de expresiones no interrogativas ni admirativas; de modo de indicar que lo escrito previamente suscita una duda o una admiración. En tal caso, se utiliza solamente el signo final, colocado entre paréntesis: Se considera capaz (?) de hacer ese trabajo. Y afirma que lo hizo correctamente (!)

Ir al principio


Los paréntesis y las llaves

Los paréntesis, y las llaves, son signos que encierran una o más frases, o períodos, que aunque se relacionan con el tema del texto o de la oración no lo hacen directamente, o lo hacen de manera accesoria o incidental. También se utilizan para agregar algún dato complementario. Cuando el contenido entre paréntesis lo requiere, se considera como texto independiente a los efectos de su puntuación (incluyendo puntos suspensivos, o signos de interrogación, etc. salvo los propios paréntesis); aunque no se utilizará el punto y aparte, por cuanto deberá respetarse la continuidad del texto principal luego de cerrarlos.

También se utilizan los paréntesis, especialmente el cierre, detrás de los números o letras con que se ordena la sucesión de numerales o literales, especialmente en documentos de tipo académico o jurídico: 1°) ... 2°) ... 3°)... o a)... b)... c), etc. En algunos casos, los literales se encierran entre paréntesis: (a)... (b)... (c), etc

Ejemplos:

  • La joven (que. por cierto, era muy bonita) llegó con toda puntualidad

  • Vivieron un tiempo en Cali (Colombia)

  • Fue durante su Presidencia (1860-1865).

  • “La cuestión es entre la libertad y el despotismo” (Artigas).

Ir al principio


Los corchetes

El uso de los corchetes es muy similar al de los paréntesis. Son signos que se emplean en la misma forma:

  • Para incorporar alguna nota aclaratoria breve, en un texto ya comprendido entre paréntesis: El gran conflicto europeo (la segunda guerra mundial [1939—1944] y la destrucción que causó) tuvo efectos terribles.

  • En documentos impresos que son traducciones o ediciones al cuidado de un revisor, para incorporar aclaraciones, complementos o comentarios originarios del mismo, marcando que no pertenecen al autor del documento; sobre todo cuando resultan necesarios para la mejor comprensión del texto y por lo tanto no es conveniente insertarlos en llamadas a pie de página.

  • En casos similares al anterior, o cuando se transcriben fragmentos o citas de textos externos al documento, y se omiten algunas palabras para abreviar y centrar el concepto determinante, sustituyéndolos por puntos suspensivos.


Al igual que ocurre con los paréntesis, los corchetes se emplean en forma abundante en las notaciones matemáticas, y químicas, especialmente en la expresión de ecuaciones y fórmulas.

Ir al principio


Los guiones y la raya

El guión simple, que es un trazo horizontal del mismo ancho que las letras, tiene los siguientes usos:

  • Para separar los elementos de algunas palabras compuestas, que pueden estar formadas por dos adjetivos, tanto que se refieran a un adjetivado de género masculino o femenino; pero en el segundo caso, el primer adjetivo integrado conservará el masculino; y del mismo modo si el adjetivado es plural, en primer término se mantendró en singular: Formación teórico-práctica en cuestiones socio-económicas.

  • En las palabras compuestas de carácter gentilicio (referentes al origen nacional) los elementos se unen sin intercalar un guión cuando existe una cierta afinidad y es frecuente (latinoamericano, francocanadiense); pero se intercala cuando la asociación de gentilicios es excepcional o virtual: suizo-nipón; luso-italiano.

  • Para separar las sílabas de las palabras; tanto cuando resulta necesario al final de una línea o renglón, como para descomponerla en las que la integran.


Con respecto a la división silábica al final del renglón, se aplican las siguientes reglas:

  • No pueden separarse las letras que integran una sílaba; salvo cuando la palabra se componga de un prefijo, en cuyo caso puede separarse el prefijo: des-alojo; de-salojo.

  • No pueden separarse dos o más vocales consecutivas, aunque no formen diptongo o triptongo; a menos que la unión provenga de ser parte de dos palabras integradas en una compuesta: latino-americano.

  • No puede separarse una vocal inicial aislada, aunque constituya una sílaba, dejándola sola al final del renglón (salvo si la precede una h): ami-go; hi-pótesis.

  • En las palabras que tienen h no inicial, (que no forme parte del dígrafo ch) esa letra se considera comienzo de la sílaba: in-hibido.

  • No se puede dividir los dígrafos ll, rr, ch.

  • En las palabras que tienen dos consonantes consecutivas, cada una pertenece a una sílaba: con-so-nan-tes.

  • Todos los grupos de dos consonantes. siendo la segunda l, r y las primeras b, c, d, f, g, k, p, t, inician la sílaba y no pueden separarse: in-flación, ma-dri-na, re-clamo, ti-gre, re-trato, re-proche.

  • En los grupos de tres consonantes contiguas, no pueden separarse las de los grupos del apartado anterior, asignádose la tercera consonante a la sílaba anterior; y en los casos en que exista la letra s quedará unida en la sílaba con las letras d, l, n, r, t: des-gracia, ist-mo, sols-ticio, cons-tante, abs-tenerse, supers-tición.

  • Cuando existan cuatro consonantes consecutivas, se separan las sílabas dejando dos consonantes en cada una: cons-treñir, abs-tracto, ads-cripción.



Entre otros usos del guión en la notación usual, se encuentran los siguientes:

  • Como separador de los números en la indicación de fechas, ya sea en el formato 1-Ene-2014 o los años de un período: 1939-1944, entre los siglos XVIII-XX.

  • Como separador entre una letra y un número, en ciertas referencias de individualización: El autobús parte del andén C-5.


La raya, que es un trazo horizontal del doble del ancho que las letras, tiene los siguientes usos:

  • Para indicar que el texto siguiente contiene lo expresado por una persona, en los casos en que no se utilicen las comillas; tanto cuando se trate de una sola persona, como cuando se trate de una conversación, en cuyo caso conviene individualizar expresa o tácitamente cada interlocutor:

      — Mañana es el examen, dijo Pedro.
      — Entonces, ponte a estudiar ahora mismo, le respondió su madre.

  • En el mismo caso anterior, cuando en el texto se ha incorporado lo expresado por una persona, en vez de colocar la raya al principio, en lugar de la coma utilizada en el ejemplo:

      Mañana es el examen —dijo Pedro, tomando un libro.
      Entonces, ponte a estudiar ahora mismo —le respondió su madre, sonriendo.

  • También en el caso anterior, cuando lo expresado por una persona continúa luego de la indicación con que se individualiza y eventualmente se hace un comentario adicional, se coloca otra raya al final:

      Mañana es el examen —dijo Pedro, tomando un libro— lo abrió y comenzó a leerlo.

    También puede utilizarse la raya en forma similar a los guiones dobles, para encerrar períodos o frases aclarativas, calificativas o complementarias que se intercalan en el transcurso de la oración. Es en buena medida facultativo optar por emplear a esos fines dos guiones, dos rayas, o incluso colocar ese texto entre comas o entre paréntesis; ello depende del estilo del redactor, considerando la índole del texto, su grado de conexión con el tema principal, su extensión, la medida en que puede ser facilmente comprendido sin distraer del objetivo del relato, etc.:

      Estuve con Federico —un compañero de clase— y tomamos un café juntos.
      Salimos de la clase, corriendo, y apenas si alcanzamos el autobús.
      El autor - que es un distinguido profesor muy acreditado por las numerosas obras que ha publicado, especialmente en el exterior - me saludó con mucha cordialidad.
      Me dijo varias cosas (que es mejor no recordar ni repetir) y se marchó muy enojada.

Ir al principio


Las comillas

Las comillas son un signo ortográfico doble, que necesariamente se coloca al principio y al final, sea de un período, sea de una oración, sea de todo un párrafo y aún de un texto bastante extenso.

Existen varias formas de graficar las comillas:

  • Tradicionalmente, en la escritura manual, se utiliza el formato de las comillas inclinadas, de arriba a la derecha la inicial y de arriba a la izquierda la final: “ ”

  • El uso generalizado de la máquina de escribir, y ulteriormente de los procesadores de texto informatizados, ha llevado a la universalización del formato de comillas rectas, por ser el único disponible (aunque en los procesadores existen formas de acceso a los otros, pero no en forma directa): " "

  • Hay también varias formas de comillas en ángulo, cuyo empleo es menos frecuente, salvo en documentos impresos, libros o documentos muy formales:

      Las comillas angulares dobles centradas: « »

      Las comillas angulares dobles alta y baja: “ „

      Las comillas angulares simples centradas: ‹ ›

También puede emplearse, en función de comillas sencillas rectas, el signo del apóstrofe: ' '

Como regla general, las comillas se emplean para encerrar textos con la función de marcar que son ajenos —especialmente las transcripciones de partes de otros documentos—; siendo de estilo correcto indicar su origen, sea habiéndolo mencionado antes de efectuar la transcripción, sea entre paréntesis al final de las comillas, sea mediante una llamada a pie de página, igualmente colocada al finalizarla.

También puede recurrirse a colocar entre comillas un texto integrante del documento, cuando es expresado por un personaje del relato, principalmente si tiene un carácter incidental y breve: Entonces, ella me dio el “si”.

Otro uso de las comillas, es con un texto propio, generalmente una palabra o unas pocas, para indicar que esa palabra o denominación no es apropiada, no responde a una verdad, o no es compartida por el autor, o con sentido irónico o burlón: Vino a mi invocando sus “prerrogativas” y sus “derechos”.

Ocasionalmente, puede ocurrir que sea pertinente o necesario incorporar una cita, entre comillas, dentro de otro texto que ya debe estar entrecomillado. En tal casos, corresponde emplear un formato de comillas internas, distinto del empleado en el texto principal; para lo cual conviene establecer un estilo jerarquizado, utilizando, por ejemplo, comillas angulares dobles centradas para el principal, y comillas inclinadas superiores o comillas rectas sencillas (apóstrofes), para el texto entrecomillado interior.

En todos los casos, la puntuación del texto inserto entre comillas, debe respetarse manteniéndola igualmente dentro de las comillas; aunque la puntuación del texto principal debe estar fuera de ellas: ¡Entró violentamente, y me dijo “¿De veras ella acaba de irse?” !.

Ir al principio


La diéresis

La diéresis —también designada como crema o trema— es un signo de puntuación que consiste en dos puntos alineados horizontalmente que se coloca, en español, exclusivamente sobre la letra u (no así en otros idiomas en que cabe sobre otras vocales) en la escritura en prosa o en verso, solamente en las combinaciones gue, gui, en las que normalmente la u no tendría sonido, para hacerla sonora: agüero, pingüino

Exclusivamente en escritura poética, es admitido colocar diéresis en palabras en que la u forma diptongo, con la finalidad de eliminarlo, y de esa forma modificar la métrica; lo cual constituye el tipo de excepción a las reglas gramaticales o idiomáticas que se designa como licencia poética.

Ir al principio


La barra inclinada

La barra inclinada es un carácter que tiene en español un uso idiomático muy excepcional:

  • En cierto tipo de documentos aparece utilizado como indicador de alternativas, especialmente en formularios en que se requiere aportar datos, y se agrega a una palabra para especificar claramente que se admiten sus variantes: día/s, esposo/a.

  • En algunas expresiones abreviadas que utilizan unidades comparativas para medir ciertas magnitudes, especialmente con unidades de tiempo, como Km/h = kilómetros por hora, o Mb/s = megabytes por segundo, o Kw/H = kilowatios por hora.

  • En algunas formas de enunciar individualizaciones, especialmente en la actividad forense, en sustitución de contra; como en las carátulas de los expedientes judiciales para identificar a las partes de un litigio: Martínez, Joaquina c/Fernández, Alberto. Divorcio.

  • En algunas expresiones de uso bancario o comercial, como abreviatura del tipo de cuenta usual en esas actividades, en la expresión cta/cte, o simplemente c/c para indicar Cuenta corriente.

  • Cuando se transcribe en forma de texto continuo un texto versificado, para separar los diversos versos: Trovador, trovador / al pasar por aquí / he perdido una flor / o, mejor, un rubí / por favor, trovador: ¿no la vió? / — No la vi.

  • Existe un uso frecuentemente muy inapropiado al enunciar términos que pueden ser alternativos o acumulativos, situación que dificilmente ocurre, uniendo las conjunciones correspondientes en el formato y/o.

Ir al principio


El apóstrofe

El apóstrofe es un signo de puntuación que en diversos idiomas se utiliza especialmente para sustituir una vocal final en una palabra, para fusionarla con la siguiente (como en la expresión c'est en francés) ; y que en idioma español no tiene un empleo propio, aunque se usaba en el español antiguo y puede encontrarse en alguna edición de obras literarias clásicas.

Salvo en el caso muy excepcional en que puede asumir la función de comillas interiores, en un texto ya entrecomillado.

En algunas formas literarias de presentar el estilo de lenguaje de algunos personajes o ambientes, el apóstrote es utilizado para marcar la forma en que en el habla se unen la última vocal de una palabra - generalmente un artículo o un pronombre posesivo - con la primera vocal de la siguiente: Venga aquí, m'hijita —dijo el gaucho.

De todos modos, puede encontrarse en algunos textos en los que se inserten palabras o expresiones de otros idiomas, especialmente apellidos de origen anglosajón.

Ir al principio


El signo de párrafo

El signo de párrafo — § — se utiliza para señalar, en los documentos en que es apropiado, la división en agrupamientos temáticos, así llamados, organizada con numerales sucesivos, en la forma § 17.

De la misma forma, sirve para indicar las remisiones a las partes de los documentos.

Ir al principio



Retorno al Indice temático de Idioma Español