Timoteo Aparicio participó asimismo como jefe militar del Partido Nacional a las órdenes de Oribe, durante el Sitio Grande de Montevideo.

Durante el gobierno del Presidente Gabriel Pereira, el Gral. Timoteo Aparicio enfrentó la revolución promovida por el Gral. César Díaz. Asimismo, durante el gobierno del Presidente Bernardo Berro, enfrentó el alzamiento encabezado por el Coronel Venancio Flores. Al triunfar Flores, Timoteo Aparicio se radicó en la provincia argentina de Entre Ríos.

Entre 1870 y 1872 Timoteo Aparicio encabezó una revolución contra el Presidente Gral. Lorenzo Batlle, que fue llamada “la revolución de las lanzas” porque fue la última lucha civil en que la lanza fue el arma principal, antes de la generalización de las armas de fuego, primero la carabina Remington y luego el fusil Mauser.

Al culminar esa lucha con la Paz de 6 de Abril de 1872, se produjo la reacción de la dirigencia más culta de la sociedad contra los llamados “partidos tradicionales”, que originó el movimiento denominado “el principismo” que predominó en la política de los años siguientes, los que fueron de importante pacificación y desarrollo.